Ya hemos ganado… ¡Ahora a continuar!
Un grupo de socias de 50a50 ha escrito este artículo, en referencia a la campaña de las candidatas de 50a50 a las elecciones a la Cámara de Comercio de Barcelona. A continuación lo reproducimos.
«Nosotras, sin muchos recursos, hemos puesto en marcha una campaña que ya ha calado en la sociedad y que no tiene marcha atrás porque somos muy poderosas. Es necesario que nos lo creamos.
Queremos el 50% de mujeres en todas las instituciones, cámaras, colegios profesionales, y demás entidades.
Lo consiguió la decana del Colegio de Abogados, M. Eugenia Gay. Lo ha conseguido la decana del Colegio de Arquitectos, Assumpció Puig i Hors.
Nos presentamos a las elecciones a la Cámara de Comercio de Barcelona porque es una institución de derecho público, que está tutelada por la Generalitat y que tiene el objetivo de trabajar por el progreso económico y social del país y por los intereses de todo el tejido empresarial: no sólo de grandes empresas, sino también y sobre todo de las medianas y pequeñas empresas y de todos los trabajadores autónomos de este país.
¡Ahora ya hemos ganado! Todos los medios se han hecho eco de nuestro planteamiento y no hay lista electoral que no se plantee el número de mujeres que tendrá.
¡Ahora ya hemos ganado! Las mujeres sabemos que nos tenemos que entender, que tenemos que ayudarnos y ser corporativistas, solidarias y no caer en juegos patriarcales.
¡Ahora ya hemos ganado! Las mujeres nos estamos ayudando para entrar en los puestos de decisión, tal como dice las Naciones Unidas: para conseguir una sociedad más justa y democrática y una economía sostenible para el planeta.
¡Ahora ya hemos ganado! Tenemos buenas sinergias con todas las mujeres de todas las candidaturas y trabajaremos sin «guerras» entre nosotras.
¿Cómo lo estamos haciendo?
De manera coherente con nuestros ideales de Bien Común para las mujeres y para toda la sociedad.
De manera independiente, sin entrar en ninguna candidatura concreta por diferentes razones que hemos expresado muchas veces pero que hay que recordar:
- Porque la norma electoral se basa en que se presenten los candidatos / candidatas por sus epígrafes y con el objetivo de defender los intereses del sector.
- Porque el sistema que se ha utilizado hasta ahora era presidencialista y personal. Aquellos que querían alcanzar la presidencia escogían a las personas afines para que le votaran en el momento en que el pleno escogiera el presidente. Liderazgo anticuado y obsoleto.
- Las mujeres siempre hemos sido «elegidas» por los hombres que mandan para formar parte de su equipo. Hemos sido «escogidas» «en cuentagotas» y bajo condiciones. Esta vez las mujeres nos hemos propuesto presentarnos «libres de cargas». Para poder decidir y luchar por nosotras mismas.
- Nos hemos organizado a partir del coliderazgo y del liderazgo en femenino, que es abierto, transversal y democrático. De esta manera es cómo nos podemos apoderar de verdad y aprender a trabajar juntas y corporativamente por primera vez en la historia, para entrar en los puestos de poder real.
- Nosotras tenemos un objetivo claro: queremos un cambio real. Un cambio generacional, por una Cámara transparente, liderada en coliderazgo y que apueste firmemente por las nuevas tecnologías, los autónomos y autónomas, el emprendimiento, la internacionalización.
Conclusiones importantísimas que podemos extraer de nuestra experiencia a estas alturas:
- Hemos ganado la primera partida y la más importante. El 50 a 50 está sobre la mesa de todos. Nadie se atreve a presentarse sin mujeres en sus candidaturas.
- A pesar de las presiones, muchas candidatas han resistido y se han apoderado, y además hemos atraído a otras nuevas con nuestro discurso.
- Tenemos un elenco de empresarias, CEOs y altas directivas del más alto nivel que se presentan y que aportarían mucho talento a la Cámara.
- Muchas empresarias (anónimas y no visibles) trabajan en los grupos de apoyo, aunque no se presenten. Son muchas mujeres que se han comprometido a trabajar por el proyecto de Innovación, de Nuevas Tecnologías y de Internacionalización. Es decir, servir al interés público y apoderar a las mujeres que estén dentro.
- Muchas hemos comprendido que es un proyecto de largo recorrido y que tardaremos lo que haga falta para alcanzar los objetivos marcados, que son de cambio y por una economía sostenible y ecológica, y una sociedad más justa.
Podemos dudar, podemos desfallecer porque no tenemos suficientes recursos, porque estamos cansadas de ser profesionales, trabajadoras, hijas, madres, esposas, porque todo esto representa una «sobrecarga» que los hombres no tienen; podemos abandonar… Es y sería comprensible… Pero formamos parte de la cadena de evolución de la propia humanidad y la sociedad nos necesita: nosotras somos responsables de hacer el cambio por nuestros hijos, hijas y generaciones futuras. No nos perdonarían no hacerlo, ahora que por primera vez tenemos la oportunidad.
¡Adelante! Sola llegaría antes, pero juntas llegaremos más lejos.»
GRUPO SOLAR